En Chimaltenango, Guatemala, en conjunto con la Red Global de Empresarios Indígenas, se inauguró la “Escuela de Negocios”. Este proyecto se enfoca en el impulso del emprendimiento para el empoderamiento económico de la mujer indígena, estableciendo el desarrollo de programas de capacitación para mujeres indígenas de la Cordillera Central del Altiplano, con el propósito de iniciar sus propios negocios y, de esa forma, mejorar el nivel de vida de ellas y de sus familias, y contribuir con el desarrollo de sus comunidades.
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En Chimaltenango, Guatemala, la Fundación Hanns Seidel en conjunto con la Red Global de Empresarios Indígenas (RGEI) y la Asociación para la Promoción de la Libertad y el Desarrollo Sostenible (ALDS) inauguró el día 07 de abril de 2016 la “Escuela de Negocios de la Red Global de Empresarios Indígenas”. Este proyecto se enfoca en el impulso del emprendimiento para el empoderamiento económico de la mujer indígena. El empoderamiento económico es un motor para estimular el desarrollo, a través del cual se logra disminuir la conflictividad social e incrementar la inclusión. Mejorar la productividad de mujeres emprendedoras por medio de capacitación y organización empresarial es una herramienta para facilitar el empoderamiento económico.
Los objetivos planteados en el proyecto establecen el desarrollo de programas de capacitación para mujeres indígenas de la Cordillera Central del Altiplano, con el propósito de iniciar sus propios emprendimientos y, de esa forma, mejorar el nivel de vida de ellas y de sus familias, y contribuir con el desarrollo de sus comunidades. Para la operativización del programa de formación y capacitación, el Comité Estratégico de la RGEI Capítulo Guatemala, desarrolló el modelo de Escuela de Negocios con una visión intercultural, adaptando metodologías y contenidos a la realidad de las mujeres indígenas de las regiones seleccionadas para este proceso. Tiene la característica de ser itinerante, lo que facilitará el acercamiento a las comunidades de cada una de las participantes.
El proceso de identificación y selección de las mujeres que participarán en el proceso formativo, se realizó a través de la comunicación y acercamiento hacia organizaciones de mujeres con trabajo y trayectoria en los municipios de San Juan La Laguna, San Pedro La Laguna, Santiago Atitlán y Panajachel del Departamento de Sololá; de los municipios de Comalapa, Patzún, Santa Apolonia, San José Poaquil y Tecpán, de Chimaltenango; de Chichichicastengo, Quiché; y San Juan Sacatepéquez del área central del país. Este proceso requirió de reuniones y visitas previas a cada comunidad, así como la realización de un taller diagnóstico de capacidades empresariales. Se cuenta con un listado de 90 mujeres de entre 18 a 60 años de edad, que hablan los idiomas kaqchikel, tz’utujil, kiche y español, con un nivel de escolaridad de educación básica, primaria o nula, empresarias y emprendedoras de los sectores del comercio, artesanías, agrícola, cerámica, etc. Se espera un promedio de 30 participantes por grupo (3 grupos).
Para dar institucionalidad al proceso formativo se estableció la alianza con el Ministerio de Economía, quienes acompañarán este proceso de manera técnica y pedagógica a través de sus delegados y representantes regionales. También algunas empresas guatemaltecas han incorporado dentro de sus planes el apoyo a la RGEI para el impulso de la Escuela de Negocios como de otras acciones que la misma Red realiza en el país y en el seno de la Red Global.
Se contó con la presencia de dos Viceministros del Ministerio de Energía y Minas, Asesores y Delegados del Ministerio de Economía, Asesores del Presidente de la República, representantes de otras entidades de Gobierno, Representantes de la Embajada de Alemania, Presidente de la Junta Directiva de ALDS, miembros del Comité Estratégico de la RGEI, miembros del Consejo Académico de Formación Empresarial y de las 90 participantes en la Escuela. También se contó con la presencia de reporteros y representantes de medios de comunicación.
Durante el evento se contó con el testimonio de tres mujeres empresarias indígenas, quienes, a través de su emprendedurismo y esfuerzo personal, no solo han logrado ser exitosas, sino que han marcado un cambio en la situación presente y futura de sus hijos, al mismo tiempo que se han convertido en una importante fuente de trabajo y superación para otras familias que hoy día forman parte de una red de trabajo generada por su iniciativa.
El Representante para Centroamérica y el Caribe de la Fundación Hanns Seidel se pronunció en cuanto a la importancia de que este esfuerzo propicie la apertura de una nueva etapa de vida llena de oportunidades, concertaciones, reciprocidad en las relaciones económicas, innovaciones en la productividad, la tecnología y cambio de paradigmas en la conciencia social de acuerdo a las exigencias del nuevo milenio. Consideró oportuno el acompañamiento en este proyecto, del sector privado del país, así como de las instancias del Estado para el emprendimiento y empresarialidad con una visión intercultural.
